jueves, 23 de marzo de 2006

Noche de penas

Otra vez estoy aquí. Claro que esta vez me escapé de la burbuja en la que me encontraba y decidí aislarme del resto, buscando la tranquilidad de esta noche otoñal, sentándome a la orilla del camino.

En el momento en que me siento, me doy cuenta que la calle esta absolutamente desierta. Bueno... casi desierta. Salvo por aquellos dos perros que vagan por ahí cerca, mirándome con cierta lástima como adivinando mi desdicha. Me doy cuenta que mis vecinos se encuentran en sus hogares, todos refugiados frente al televisor. El cemento está muy helado, pero aún así resisto el frío, todo por disfrutar de ésta noche fresca, clara y estrellada.

Pienso en mi Blog, uno de mis refugios favoritos para depositar mis impresiones. Me decido por trazar este preciso instante. Instante en el cuál escupiré toda esta pena que llevo dentro. Así lo haré, aunque se lea algo patético. Y lo siento mucho por aquellas personas que leen mi bitácora y que además de encontrarlo triste, “patúamente”no postean. Pero "así no más es la cosa", es mi espacio personal y en mi vida no siempre cunden los buenos momentos.

Casi siempre trato de rehuir la pena, pero ésta al final siempre me alcanza. Hoy es un día de ésos, día de penas varias. Pienso muchas cosas, pensamientos tan rápidos que vuelan como los mosquitos en las luminarias. Tristezas acumuladas de días pasados, que me nacen del interior, como del estómago, y que se deposita y crece como un tumor, aportando todo su dolor a través de mi débil cuerpo.

Definitivamente, las relaciones humanas no son lo mío. Por eso mismo creo que me volveré un ermitaño o un autista. Estoy cansado de decepcionar y de recibir decepciones. “El que no se arriesga no cruza el río”... bla bla bla..., me vale un ajo esos dichos en este momento. Aburrido de buscar respuestas en la gente: en sus actos, en sus dichos, en su forma tan variada de ver la vida, para así de una vez lograr comprenderlos. Sé que no hay nada que entender, solo ver. Muchas ideas que me confunden. Y es tanta la confusión que me da miedo. ¿Adán con miedo? Si, también siento miedo. Me pregunto: ¿qué esperar de la gente? ¿qué esperan ellos de mi?, y solo viene un rotundo: ¡NO SË!. No me importa saberlo tampoco, por hoy cierro mis ojos para no saber de nada.

Esta claro que mis penas tienen un origen... yo. ¿Seré entonces yo el problema?. Y otra vez la respuesta: ¡NO SÉ!. Quito bruscamente mi mirada del oscuro bosque y la dejo caer sobre ese auto que se aproxima, solo para que aquellas interrogantes no sigan perturbando más mi mente.

Aunque me muestro firme frente a todos, las palabras de ciertas personas han caído hondo sobre mi, hiriendo mis sentimientos sin yo poder decir o hacer nada.

Trato de esperar mi ansiada libertad, pero es como esperar nada. Mi conciencia me habla y me responde: El que espera y confía en el hombre nada recibirá, y el que ama esta vida prontamente la perderá. Claramente me siento decepcionado de este mundo y su sistema. Creo ser un extraño en mi propia sociedad. Ya no quiero cuestionar más a la gente ni saber que ellos mismos me cuestionen. Evitaré de mostrarme racional y desbordaré toda mi locura en pos de mis razones. Seguiré levantando más alto esta muralla que construyo, la muralla de mi orgullo, la que me servirá para aislar mis mundos de los demás mundos que me invaden.

Pero, ¿por qué pensar así?. Justo cuando todos me necesitan me encuentran, y cuando yo necesito de ellos nunca están. Y si pienso en aquellas personas que me han demostrado su cariño... cariño que yo no les puedo corresponder, me siento más afligido.

Siento que entrego mucho y que recibo poco. Pero de la misma forma que entrego mucho, oculto mucho también. Quisiera recibir paciencia, comprensión, empatía, cariño, sentir no sé... ya no sentir nada. Mejor será para mi, transformarme en un bloque de cemento frío y duro como el de esta berma, para que así no sea nunca más abatido. Total, como dice el dicho: entre más conozco a las personas... más quiero a mi perro.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

:OOOOOOOO
AMIGO AQUI ME HAGO PRESENTE bien sentida tu compocicion pero = buena aunque quien te conociera cabro bendito sabria tus inspiraciones de por que lo escribistes un abrazo y aqui estoy

Anónimo dijo...

MAS ADELANTE HE DE ENTENDERLO
MAS ADELANTE HE DE ENTENDER
NO MAS LA PENA NO MAS EL LLANTO
TODO SE SUFRE POR NUESTRO BIEN...

Te recuerdo esa canción

Comentador dijo...

Hola, primero gracias por tus simpáticos comentarios en mi blog, palabras como las tuyas me inspiran a seguir. Yo justo estaba escribiendo el nuevo artículo cuando apareció tu mensaje.

Y segundo, me apena leer tu último post. Me recuerda mis propias catarsis pero son necesarias.
Aunque no nos guste siempre tendremos noches "mas oscuras", tiempos de lágrimas y ciertamente de decepción, pero pienso y siempre lo he creído que no es sano culparse a uno y rechazarse -o a los demás. Los momentos "malos" son siempre "señales" de que algo no iba a funcionar asi que debe terminarse, asi es como la vida nos habla: como el ciclo de las olas, no siempre están altas, también caen y se desparraman por toda la arena, es una constante, como las estaciones, no siempre habrá primavera, el invierno es necesario.
Lo único que te pediría es no proceder con eso del muro, que entonces cerrarás las puertas de alguien bueno y de bien, pero sí ayuda ser un poco más desconfiado ;-)

Espero vayas sanando amigo y si no te molesta, te agregué a la lista de recomendados de mi blog.

cffm.